Contaminación
alimentaria
La contaminación alimentaria se define como
la presencia de cualquier materia anormal en el alimento que comprometa su
calidad para el consumo humano. Cuando hablamos de contaminación alimentaria
estamos hablando de contaminación química, física o biológica. Esta última,
causada por microorganismos, que incluye las denominadas toxiinfecciones
alimentarias, es la que origina un mayor número de casos de enfermedades. El
alimento es, por sus factores intrínsecos, un caldo de cultivo ideal para el
crecimiento de microorganismos. La presencia de determinados agentes
microbianos, unida a condiciones de manipulación y conservación no adecuadas,
puede dar lugar a las llamadas TIA. La alta prevalencia de estos cuadros en los
últimos años y la incidencia económica del abordaje de éstos, ha llevado a los
organismos causantes a crear un marco legal y normativo para asegurar la
calidad del alimento y, consecuentemente, evitar repercusiones en el
consumidor.
Una TIA es una enfermedad causada por
microorganismos patógenos que se produce poco después (horas o días) de haber
consumido un alimento o una bebida no aptos para el consumo.
Contaminación
Biológica
La contaminación biológica aparece cuando
los organismos descomponen elementos de gran importancia para el suelo, el agua
y el aire. Dicha descomposición afecta principalmente a los seres vivos,
suponiendo altos riesgos de salud e incluso la muerte.
Normalmente los organismos que causan la
contaminación biológica son los parásitos, las bacterias, los virus y los
hongos. Sin embargo, algunos insectos también pueden llegar a generar problemas
y convertirse en transmisores de agentes contaminantes.
Es importante poner todos los medios a nuestro alcance para prevenir la contaminación de aquellos alimentos que posteriormente van a ser consumidos, ya que de ello depende, en gran medida, el estado de nuestra salud. Yo recomiendo seguir algunos consejos:
ResponderBorrar-Lavarse las manos antes de cocinar y después de manipular alimentos.
-Lavar los alimentos correctamente, al igual que los utensilios antes y después de usarlos.
-Utilizar distintas tablas de cortar carnes, pescados, verduras.
-Etiquetar adecuadamente las salsas y comidas preparadas indicando la presencia de alérgenos o no, así como su fecha de vencimiento.
-La temperatura es el factor más importante; por encima de los 70°C la mayoría de los microorganismos mueren y por debajo de 5°C se inactivan y permanecen latentes.